5 casos en los que proteger y cifrar tus datos al subirlos a Internet
El uso de información personal y confidencial, con el paso de los años va en aumento hasta tal punto que guardamos casi todo en el disco de un PC. Claro, confiamos en la seguridad del mismo, más si tomamos ciertas precauciones por ejemplo en Windows para que nadie pueda acceder a los mismos.
Ya hablemos de entornos relacionados con el ámbito profesional o con el doméstico, lo cierto es que en el ordenador almacenamos hoy día ficheros de todo tipo. Con esto en realidad nos referimos a documentos profesionales, fotos y vídeos personales, credenciales de acceso, datos bancarios y médicos, entre otros muchos. Para proteger todos ellos tomamos determinadas precauciones como poner una contraseña de acceso al sistema, proteger la ejecución de ciertos programas, ocultar carpetas, etc.
Con todo esto que os comentamos lo que en realidad logramos es que el acceso a todo lo personal almacenado en el PC, sea mucho más complicado. Ahora bien, nos podemos llegar a preguntar lo que sucede con todo ello cuando lo usamos en Internet. Como os podréis imaginar, buena parte de esas protecciones se pierden cuando transmitimos esos archivos o carpetas confidenciales, online. Por tanto llegados a este punto una de las mejores opciones de las que podemos echar mano, es de cifrar esos datos antes de transmitirlos, por ejemplo con BitLocker de Windows 10 Pro.
Tal es así que a continuación os hablaremos de los principales motivos por los que cifrar estos datos o informaciones que vamos a usar en Internet.
Al subirlos y almacenarlos en tu espacio en la nube
Los espacios de almacenamiento en la nube se han convertido en una excelente alternativa a la hora de guardar contenidos de todo tipo en servidores remotos. Estos suelen estar protegidos por una serie de credenciales personales para su acceso, pero no dejan de estar guardados en servidores de otros. Es por ello que usar algún sistema de cifrado previo, nunca va a estar de más.
Antes de enviarlos por correo electrónico
Otro sistema usado durante muchos años es el correo electrónico. Seguro que muchos de vosotros a diarios enviáis fotos, documentos o cualquier fichero a uno o varios remitentes. Para ello esos antes dan una serie de pasos online, por lo que pueden ser interceptados por algún ciberdelincuente. Es por ello que aquí, en caso necesario y si los archivos lo merecen, usar un cifrado tampoco va a sobrar.
Si los compartimos a través de clientes P2P
Algo similar nos encontramos con las redes P2P, ya sean de uso público o privado. De hecho si usamos el segundo de los métodos, ese modo de protección que os comentamos se hace especialmente necesario. Y es que a pesar de la seguridad que a priori nos presentan este tipo de transmisiones, siempre hay algunos que son capaces de saltárselas.
Al compartirlos con otros en cualquier web
En determinadas ocasiones, a la hora de trabajar con archivos tanto personales como profesionales, el destinatario nos puede pedir que subamos el fichero a una web en concreto. Es más que probable, más si por ejemplo hablamos de datos médicos o similar, que esa web esté más que protegida, pero un añadido de seguridad tampoco va a sobrar aquí.
Usando plataformas gratuitas online para compartir archivos grandes
Y para terminar os diremos que hay varias plataformas online que nos permite, de forma gratuita, compartir archivos de gran tamaño. A pesar de que estas suelen incluir, por lo que nos aseguran, sus propios sistemas de cifrado, usando uno propio nos aseguramos de que nadie más pueda acceder a esa información personal.
Fuente: SoftZone https://ift.tt/3q1vnL9 Autor: David Onieva