Edge lleva sus extensiones a la Windows Store: mala idea
Las extensiones son uno de los aspectos más importantes de los navegadores web. Gracias a ellas podemos añadirles todo tipo de funciones que de serie no vienen disponibles para mejorar su funcionalidad. Chrome, el navegador más utilizado, cuenta con su propia tienda, la Chrome Store, desde la que bajar estas extensiones. Mozilla, con Firefox, lo mismo, tiene su add-on store para bajar estas extensiones. Pero, ¿qué pasa con Edge? También tiene su tienda, pero de cara a Windows 11, Microsoft quiere revolucionar la forma de bajar e instalar estas extensiones.
La tienda de Windows 11 va a ser la tienda de todos para todo. Microsoft quiere potenciar su plataforma de contenido digital permitiendo a los desarrolladores subir sus aplicaciones a ella, sean del tipo que sean (y sin cobrar comisiones), además de hacer hueco a los juegos y a las aplicaciones de Android, las cuales se podrán bajar igualmente desde esta tienda. Además, Microsoft acaba de anunciar un nuevo tipo de contenido que vamos a poder bajar desde esta plataforma: extensiones de Edge.
La tienda más completa para potenciar Windows 11 y Edge
El nuevo Edge está basado en Chromium y, por ello, es compatible con las extensiones de Google Chrome. Sin embargo, Microsoft quiere tener su propia tienda de extensiones, con add-ons diseñados especialmente para su navegador para evitar posibles problemas de compatibilidad. Hasta ahora, Microsoft imitaba a Google y Mozilla permitiendo a los usuarios bajar extensiones desde su propia web. Sin embargo, con el fin de ofrecer una experiencia unificada de la Microsoft Store, dentro de poco esto va a cambiar. Y es que estas extensiones van a dar el salto a un apartado concreto dentro de la nueva tienda de Windows 11.
Con esto, Microsoft quiere dar más visibilidad y publicidad a su navegador, además de facilitar (al menos en teoría) la búsqueda y descarga de los add-ons desde esta tienda. Las primeras extensiones, Outlook y LastPass, ya están disponibles dentro de esta tienda. Y, poco a poco, el número irá creciendo.
Por el momento no se sabe cómo hará Microsoft este cambio. Pero lo más lógico es que la compañía migue automáticamente todas las extensiones de su web actual a la Store sin que los desarrolladores tengan que hacer nada más. De todas formas, es probable que la tienda web actual siga funcionando, principalmente porque los usuarios de Linux y macOS no tienen acceso a esta Store.
Repetir los errores del pasado es una mala idea
No es la primera vez que Microsoft permite bajar extensiones del navegador desde la tienda. La versión clásica de Edge ya permitía hacer eso en los inicios de Windows 10, y fue un fracaso por muchos motivos. El principal de todos es que los desarrolladores quieren una plataforma sencilla donde subir y publicar sus extensiones. La Chrome Store es una web muy sencilla para ello, igual que la tienda de add-ons de Mozilla. Pero la Tienda de Windows no lo es, ni para los desarrolladores ni para los usuarios.
Puede que Microsoft la simplifique para que todos puedan usarla de la mejor forma posible, pero debemos enfrentarnos a un segundo problema: el malware. Si la tienda de Windows 10 ya está llena de aplicaciones falsas y de muy baja calidad, permitir la llegada de las extensiones no es una buena idea. Ya le ha pasado a Mozilla que, por falta de control ha tenido serios problemas con extensiones falsas y maliciosas, y ahora le va a volver a ocurrir lo mismo a Microsoft.
Para que esta nueva tienda de extensiones tenga éxito Microsoft debe simplificar muchísimo su forma de uso, tanto para usuarios como para desarrolladores. Y, además, contar con controles mucho más exhaustivos que nos permitan usar esta tienda, y bajar todo tipo de aplicaciones, programas y extensiones, sin correr peligro.
Fuente: SoftZone https://ift.tt/2UilMVn Autor: Rubén Velasco