Saca más partido a las distros ligeras de Linux con estos usos
En el momento de adquirir un nuevo ordenador portátil o de sobremesa, en la mayoría de las ocasiones el mismo nos llega con Windows. Pero como sabréis en este sentido existen otras muchas alternativas, como sucede con las distros de Linux de las que podemos echar mano.
De hecho son muchos los usuarios que prefieren trabajar con un sistema operativo de código abierto como este, o que quieren probar para ver cómo funciona. También se puede dar el caso de que tengamos un PC complementario con Linux, o que deseemos dar una segunda vida a un ordenador algo más antiguo. Sea como sean hay que admitir que estos sistemas cada vez se están haciendo más asequibles para la mayoría de los usuarios, incluso para los novatos en estas lides.
No podemos olvidar que los desarrolladores de estas distribuciones intentan facilitarnos las cosas en gran medida para desechar esa idea de que Linux es difícil. Desde luego en estos momentos se podría decir que eso no es cierto, al menos para un uso básico y habitual del PC. Luego ya si nos queremos adentrar un poco más, la cosa se complica un poco. Sea como sea, estas distros son una alternativa perfecta en muchos casos a Windows.
De hecho si nos decantamos por una propuesta de este tipo, ligera y sencilla, sus usos pueden ser muchos en un PC. Es por todo ello que a continuación os daremos algunos usos al instalar una distro ligera en vuestro equipo y así darle una utilidad que podamos aprovechar.
Usar una distro ligera para dar una segunda vida a un PC viejo
Uno de lo usos más comunes que se suele hacer de una distro ligera de Linux, es para devolver a la vida un PC antiguo. Hablamos de un ordenador que no sea capaz de mover un Windows 10 con uno o dos gigas de RAM. Instalando una de estas distribuciones antiguas, podremos disponer de nuevo de un equipo para realizar tareas básicas. Aquí nos referimos a trabajos tales como editar textos, navegar por Internet, visualizar fotos, etc.
Un nuevo ordenador con Linux como servidor de archivos
Por otro lado, un PC antiguo o limitado en cuanto a especificaciones con una distro ligera, nos podría ser de enorme utilidad como servidor de archivos. Es decir, podríamos usar el mismo para guardar todo tipo de ficheros de audio o vídeo, y así liberar el disco de nuestro PC principal. Pero al mismo tiempo, más si lo incluimos en una red doméstica, tendremos acceso a toda esa información siempre que la necesitemos.
Funcionar como consola retro de videojuegos
Otro de los tipos de uso de los que podemos echar mano en este sentido, es para montar una consola de juegos retro. Sabemos que estos títulos no requieren de mucha potencia hardware en los equipos actuales
Es por ello que podemos usar este conjunto que os hemos mencionado para sumarle un emulador y disfrutar de juegos retro en ese PC antiguo con Linux. Seguro que más de uno lo agradecerá y pasará muy buenos momentos con este renovado equipo.
Fuente: SoftZone https://ift.tt/3wIMox5 Autor: David Onieva